Resumo
Mário Saa, uno de los intelectuales más destacados del Alentejo del siglo XX, pasó buena parte de su vida en una finca del municipio de Avis: Pero Viegas. El cortijo de Pero Viegas, construido en los últimos años del siglo XIX por el padre, constituía la sede de la casa agrícola. La familia había arrendado en 1917 la mayor parte de las tierras y vivía principalmente de ese rendimiento. Mário Saa, no habiendo concluido los cursos universitarios iniciados, dependía de los ingresos de la agricultura y del corcho. En el archivo de la Fundación Paes Teles existe documentación sobre la administración de las fincas en los últimos treinta años de vida del escritor: desde correspondencia con industriales corcheros, hasta cartografía de las diferentes propiedades. La dehesa portuguesa de alcornoque es hoy un tipo de propiedad casi exclusivamente de titularidad privada y por ese motivo son casi inexistentes los archivos donde consultar la historia agraria de estas grandes propiedades. La existencia de esta documentación en la sede de la fundación en Ervedal, posibilita una nueva mirada sobre la historia agraria del Alentejo en el siglo XX.